Mamá ,quiero ser artista

Hay muchas bailarinas ya de cuarta generación, es decir, sus bisabuelas ya bailaban,por lo que podemos decir que estas compañeras han crecido en el ambiente idóneo.Hoy voy a hablar de la importancia de las madres en el camino de las bellydance en ciernes. No daré nombres porque creo que en cuanto las describa todo el mundo se dará cuenta de que conoce a alguien que encaja en mi descripción:
- La madre a lo entrenadora de gimnasia rítmica: Muy abundantes en los paises del este de Europa. Un día descubren que su hija tiene potencial y deciden sacar partido de este don.La someten a sesiones de entrenamiento durísimo y extenuante hasta convertirla en la "superstar number one". Al cabo de unos años,entre shows, workshops, Dvds,etc esta madre se habrá hecho rica,pero  habrá destrozado la juventud de su hija.

-La madre a lo "madre de la Pantoja". Se trata de la madre omnipresente, que acompaña a su hija a todo tipo de eventos, festivales,etc. como un "alter ego", vigilando celosamente las compañías de su niña,lo que come, los novios que le salen para proteger ¿su honra? Sobreprotección derivada de un amor mal entendido.

-La madre artista frustrada: Son madres que hubiesen querido ser bailarinas o artistas y ven en sus hijas un reflejo de lo que pudieron  haber sido . Son ellas las que alientan a su niña a profesionalizarse aunque para ésta la danza no sea más que un hobby. Normalmente la hija aburrida de la pesadez de su madre abandonará la danza en cuanto se haga mujer adulta y controle su propia vida.

-La madre anti danza Es la que pone el grito en el cielo cuando se entera de los planes de su hija. Muchas veces por desconocimiento creen que su hija a va vivir una vida indigna,algo así como un camino de perdición. Gracias a Dios cada vez hay menos madres de este tipo, pues hoy en día ser belly dancer es perfectamente compatible con llevar una vida normal y digna. Con el tiempo, este tipo de madres suelen ceder y se mostrarán orgullosas de sus hijas.

-La madre bailarina.En este caso la madre también baila.Puede ser maravilloso o catastrófico, pues si la madre apoya a su hija,quién mejor que otra bailarina puede aportar su saber y experiencia:serán las mejores compañeras,pero también de forma consciente o inconsciente puede haber celos y envidias si la relación madre-hija no es fluida y sana.
Tenemos muchísimos ejemplos de sagas de bailarinas de segunda, tercera o incluso cuarta generación:Las Salimpour , o Ansunya y su madre en Estados Unidos son el claro ejemplo de madre e hija formando un perfecto tandem. Aquí os dejo con un rarísimo video de Jamila y Suhayla Salimpour bailando juntas.